De Bruselas a Gante: En bicicleta

Partiendo para un viaje de tres días por caminos rurales, cinco jóvenes sobre dos ruedas no se dieron por vencidos para llegar a la ciudad flamenca. Marcado por paradas bienvenidas, noches bajo tienda de campaña y reparaciones improvisadas, la aventura ofreció un buen aire fresco al alegre grupo.

Testimonio de Giulia Marcuccio, voluntaria en Dynamo International:

«El 28 de abril de 2025, mi compañera Imane, cinco jóvenes y yo partimos hacia el campamento “Bicicletta”. Es la palabra italiana que corresponde a la palabra francesa “vélo” (bicicleta): de hecho, el objetivo de este campamento de tres días era precisamente visitar Bélgica en bicicleta, hasta la ciudad de Gante.

Nuestro viaje se dividió en tres etapas. Partimos de Dynamo International, y durante el primer día cruzamos hermosos paisajes rurales, vimos varios animales y, después de pedalear unos 40 km, llegamos a Alost. Allí dormimos en nuestras tiendas de campaña, acogidos por una señora en su hermoso jardín.

El segundo día estuvo completamente dedicado a la etapa entre Alost y Gante, y ciertamente no faltaron esfuerzos físicos… ¡ni imprevistos! De hecho, en el camino, la rueda del carro en el que transportábamos las tiendas y el resto del equipo se pinchó. Por lo tanto, tuvimos que detenernos, pero en muy poco tiempo, los jóvenes lograron cambiar la rueda, demostrando increíbles habilidades y mucha ingeniosidad. Así pudimos continuar y llegamos a nuestro campamento en Gante después de recorrer casi la misma distancia que el día anterior.

Luego, aprovechamos el tercer día para explorar la ciudad, siempre en bicicleta. Fue muy interesante visitar la Catedral de San Bavón, admirar el Castillo de los Condes de Flandes y pasar por la Calle de los Graffitis. La tarde en Gante fue sin duda uno de los mejores momentos de este campamento: disfrutamos de un merecido descanso a orillas del lago cerca del camping, comiendo papas fritas. Finalmente, terminamos nuestro viaje regresando a Bruselas en tren.

Fueron tres días realmente enriquecedores, entre deporte, descubrimientos y compartir. Ya estamos deseando partir de nuevo y, quién sabe, ¡quizás la próxima vez lleguemos hasta el mar!»